sábado, 20 de abril de 2013

Cerrando Circulos....Paulo Cohelho

Quiero compartir un documento para reflexionar sobre nuestro comportamiento ante la vida, que tiene que ver con nuestro pasado, presente y futuro. Ver lo difícil que puede ser para algunos desprenderse de los momentos y vivencias que han formado lo que hoy somos, pero que tenemos que dejar ir, para poder recuperar fuerzas y seguir adelante.
 
Siempre es preciso saber cuándo se acaba una etapa de la vida. Si insistes en permanecer en ella más allá del tiempo necesario, pierdes la alegría y el sentido del resto. Cerrando círculos, o cerrando puertas, o cerrando capítulos, como quieras llamarlo. Lo importante es poder cerrarlos, y dejar ir momentos de la vida que se van clausurando.
¿Terminó tu trabajo?, ¿Se acabó tu relación?, ¿Ya no vives más en esa casa?, ¿Debes irte de viaje?, ¿La relación se acabó? Puedes pasarte mucho tiempo de tu presente "revolcándote" en los por qué, en devolver el cassette y tratar de entender por qué sucedió tal o cual hecho.
El desgaste va a ser infinito, porque en la vida, tú, yo, tu amigo, tus hijos, tus hermanos, todos y todas estamos encaminados hacia ir cerrando capítulos, ir dando vuelta a la hoja, a terminar con etapas, o con momentos de la vida y seguir adelante.
No podemos estar en el presente añorando el pasado. Ni siquiera preguntándonos por qué. Lo que sucedió, sucedió, y hay que soltarlo, hay que desprenderse. No podemos ser niños eternos, ni adolescentes tardíos, ni empleados de empresas inexistentes, ni tener vínculos con quien no quiere estar vinculado a nosotros. ¡Los hechos pasan y hay que dejarlos ir.
Por eso, a veces es tan importante destruir recuerdos, regalar presentes, cambiar de casa, romper papeles, tirar documentos, y vender o regalar libros.
Los cambios externos pueden simbolizar procesos interiores de superación.
Dejar ir, soltar, desprenderse. En la vida nadie juega con las cartas marcadas, y hay que aprender a perder y a ganar. Hay que dejar ir, hay que dar vuelta a la hoja, hay que vivir sólo lo que tenemos en el presente…
El pasado ya pasó. No esperes que te lo devuelvan, no esperes que te reconozcan, no esperes que alguna vez se den cuenta de quién eres tú… Suelta el resentimiento. El prender "tu televisor personal" para darle y darle al asunto, lo único que consigue es dañarte lentamente, envenenarte y amargarte.
La vida está para adelante, nunca para atrás. Si andas por la vida dejando "puertas abiertas" por si acaso, nunca podrás desprenderte, ni vivir lo de hoy con satisfacción. ¿Noviazgos o amistades que no clausuran?, ¿Posibilidades de regresar? (¿a qué?), ¿Necesidad de aclaraciones?, ¿Palabras que no se dijeron?, ¿Silencios que lo invadieron?
Si puedes enfrentarlos ya y ahora, hazlo, si no, déjalos ir, cierra capítulos. Dite a ti mismo que no, que no vuelven. Pero no por orgullo ni soberbia, sino, porque tú ya no encajas allí en ese lugar, en ese corazón, en esa habitación, en esa casa, en esa oficina, en ese oficio.
Tú ya no eres el mismo que fuiste hace dos días, hace tres meses, hace un año. Por lo tanto, no hay nada a qué volver. Cierra la puerta, da vuelta a la hoja, cierra el círculo. Ni tú serás el mismo, ni el entorno al que regresas será igual, porque en la vida nada se queda quieto, nada es estático. Es salud mental, amor por ti mismo, desprender lo que ya no está en tu vida.
Recuerda que nada es indispensable.
Nada es vital para vivir porque cuando tú viniste a este mundo, llegaste sin ese adhesivo.
Por lo tanto, es costumbre vivir pegado a él, y es un trabajo personal aprender a vivir sin él, sin el adhesivo humano o físico que hoy te duele dejar ir.
Es un proceso de aprender a desprenderse y, humanamente se puede lograr. Sólo es costumbre, apego, necesidad. Por eso cierra, clausura, limpia, tira, oxigena, despréndete, sacúdete, suéltate.
Hay muchas palabras para significar salud mental y cualquiera que sea la que escojas, te ayudará definitivamente a seguir para adelante con tranquilidad. ¡Esa es la vida!

viernes, 19 de abril de 2013

!!!Hermosa forma de hablar de la muerte y resurección¡¡¡

Henry van Dike habla de la muerte así: Estoy parado a la orilla del mar. Un bote de vela que está allí cerca despliega sus blancas velas y se aleja hacia el mar azul, empujado por la brisa mañanera. El bote es objeto de belleza y fortaleza y yo, desde donde estoy parado, veo que se aleja y se convierte en un punto en el horizonte, allí donde se juntan el cielo y el mar. En eso, alguien que está parado a mi lado, dice: "¡Allá va! ¡Desapareció¡".
 
Desapareció, pero ¿a dónde se fue? Desapareció de mi vista; eso es todo. El bote sigue tan majestuoso y su mástil tan alto como cuando estaba a mi lado. Y sigue siendo capaz de transportar a todos sus tripulantes hasta llegar a su destino.  La pequeñez de su tamaño está en mi, no en él.  Y en el preciso momento que alguien a mi lado dice: "Allá va", hay otros ojos que lo ven venir y con alegría dicen "Ahí viene"
 
¿Qué explicación le damos a esta parábola de van Dike?
 
 
 
 
¿Has notado alguna vez
que todo mundo quiere ir al cielo,
pero nadie quiere morir?
 
Anónimo

lunes, 15 de abril de 2013

Que impacto tiene la idea de morir en mi estilo de vida.....?

El famoso aviador francés Antoine de Saint-Exupery tuvo que hacer un aterrizaje forzoso en el desierto del Sahara, miles de millas de la civilización.  La cantidad de agua con la que contaba era muy poca.
 
Mientras que trataba de arreglar el motor de su avión, Saint-Exupery vio a la muerte cara a cara.  Como dos boxeadores, se miraron fijamente a los ojos.
 
El estar frente a frente con la muerte, como en el caso de Saint-Exupery, nos recuerda las palabras de John McLelland en The Clown and the Crocodile (El payaso y el cocodrilo):
 
"Un día un grupo de personas irán al cementerio, tendrán un servicio breve y luego regresaran a casa. Todos menos uno, serás tú".
 
"Que pena que lo último que uno haga es morirse", dice Robert Herhold, "ya que podría enseñar mucho acerca de la vida"
 
Hago esta reflexión hoy en particular porque para mi es un día especial, mi madre cumple cinco años de haber fallecido y tengo un doble sentimiento en mi corazón.
 
El de extrañarla, que es egoísta porque se que esta con Dios y se marcho tranquila cuando el la llamo.
 
Y el sentimiento de jubilo, de prepararme cada día por si ese día me llama el Señor.
 
Yo admire mucho a Facundo Cabral, quien fue asesinado en Guatemala impunemente pero el algo se sospechaba de la cercanía de su partida. Claro no sabía como sería esta, pero como todo buen católico sabía que llegaría en algún momento.
 
Y para dar fe de esto, solo unos cuantos días en una charla que tuvo con Carlos Loret de Mola en el noticiero de éste último.
 
Justamente una de las preguntas que Carlos le hizo a Facundo (palabras más o menos) era sobre que pensaba de la muerte y de lo que sucedería después.
 
Facundo con la honestidad y claridad que tenía para decir las cosas respondió, "Es el viaje más maravilloso que se puede hacer y debemos estar contentos cuando nos llamen para hacerlo"
 
Espero que estas palabras de personas como nosotros, nos alimenten el animo de que no es tan malo morir, viene con nosotros ese compromiso desde que nacemos.

miércoles, 3 de abril de 2013

NAUFRAGOS.............

Un hombre y una mujer naufragaron en una isla desierta y se quedaron allí muchos años. Un  día, un barco divisó sus señales de humo y les envió un bote salvavidas. Pero en vez de rescatarlos, los tripulantes del bote les entregaron varios periódicos y les dijeron: "El Capitán quiere que vean lo que esta sucesidiendo en el mundo, antes de decidir si regresan o no".

Habrá momentos en la vida en los cuales sentiremos que deseamos irnos a una isla desierta. Pero sabemos que no es posible. Dios nos puso en el mundo para hacer de este un mejor lugar. Todos tenemos una función que cumplir en el plan salvifico de Dios.

A pesar de esto, cada uno decide. Puede responder afirmativamente e involucrarse en el plan de Dios, o puede responder negativamente y hacer lo que le plazca.

Que sencillo pero que difícil decidir........solo tenemos que mirar los periódicos y podemos ver como van las decisiones de todos nosotros.

Espero que tengamos un momento y reflexionemos que realmente queremos en el futuro de nosotros, nuestros hijos y la humanidad.


lunes, 1 de abril de 2013

La Crisis .........?

Estamos cumpliendo cinco años de crisis económica y no encontramos forma clara de entender todas las explicaciones que nos dan los "expertos".

Y estamos a más de cinco años de una crisis de valores humanos para la que no hay que entender nada, porque no aparecen "expertos" recurrentes que den explicaciones.

Estoy seguro que ambas estan totalmente conectadas y una afecta a la otra dependiendo de su comportamiento, estabilidad, capacidad de recuperación de algún estado de normalidad si pudiese llamarse así, pero lo que me queda claro es que es urgente que debemos empezar a hacer algo o aportar cuando menos ideas.

Y es justamente hoy que pienso reiniciar mi escribir por mi blogg tratando de aportar algo de mi mismo a este mundo al que llegamos justamente a tratar de hacerlo mejor, pero en algún lado lo olvidamos.

Por tanto, tratare de que usando las redes sociales tan eficientes para una cosas y tan silenciosas para otras puedan ayudarme a llevar mensajes de alivio, reflexión, discusión, enrequecimiento, busqueda, superación, etc.

Hoy nos quedaremos con la reflexión de un gran pensador y hacedor que dijo para cuando hay crisis, dicho por el a principios del Siglo Pasado.

La Crisis según Albert Einstein.

" No pretendamos que las cosas cambién, sí siempre hacemos los mismo. La crisis es la mejor bendición que puede sucederle a personas y países, porque la crisis trae progresos. La creatividad nace de la angustia, como el día nace de la noche oscura. Es en la crisis que nace la inventiva, los descubrimientos y las grandes estrategias. Quien supera la crisis, se supera a sí mismo sin quedar 'superado'.

Quien atribuye a la crisis sus fracasos y penurias, violenta su propio talento y respeta más los problemas que a las soluciones. La verdadera crisis, es la crisis de la incompetencia. el inconveniente de las personas y los países es la pereza para encontrar las salidas y soluciones. Sin crisis no hay desafios, sin desafios la vida es una rutina, una lenta agonía. Sin crisis no hay méritos. Es la crisis donde aflora lo mejor de cada uno, porque sin crisis todo viento es caricia. Hablar de crisis es promoverla, y callar en la crisis es exaltar el conformismo. En vez de esto, trabajemos duro. Acabemos de una vez con la única crisis amenazadora, que es la tragedia de no querer luchar por superarla. "