Día 57:
¿No es Maravilloso?
Ayer, Kate compartió contigo la historia de
una mujer que utilizó sus sentimientos y su imaginación para moverse de una
situación nefasta a una mejor vida. Cada noche se quedaba dormida diciendo
"¿No es maravilloso? ¡Algo maravilloso me está sucediendo
ahora!"
Eso fue todo lo que ella hizo. Nada
extraordinario. No tuvo que trabajar. Solo se imaginó como se sentiría si su
vida fuera maravillosa y entonces evocó esos sentimientos. Y después de poco
tiempo, su vida se volvió maravillosa. Es realmente sorprendente lo que puede
hacer un poco de imaginación. Así es que, hoy en la noche, antes de irte a dormir,
te pido que uses tu imaginación para crear el sentimiento de que algo maravilloso
está sucediendo en tu vida ahora mismo. En este mismo momento. No lo tienes que
definir. Ni siquiera tienes que tratar de entender lo que es. Solo evoca en tu mente
los sentimientos que experimentarías si algo realmente, verdaderamente, sorprendentemente
maravilloso te estuviera sucediendo ahora mismo. Estarías emocionadísimo, ¿no?
Así es que emociónate. Y deja que ese sea el pensamiento que te lleves a
dormir. Y mañana en la noche, has lo mismo. Y la noche después de esa, también.
Es más, todas las noches hasta que termine el experimento, prepárate para irte a
dormir imaginando que algo realmente maravilloso está sucediendo en tu vida, y entonces
siente los sentimientos y vete a dormir pensando en que algo realmente maravilloso
y extraordinario está sucediendo ahora mismo. Es mucho más sencillo de lo que
te imaginas. Pruébalo. Te reirás de lo fácil que es. Es fácil porque... Algo
realmente maravilloso está sucediendo en tu vida ahora mismo. ¿No es
maravilloso?
La Acción del Día:
1. Lee tu Plan de Negocio para la Prosperidad
y las once cosas de tu lista de agradecimientos.
2. Toma un momento para pararte firmemente
con un brazo alzado hacia el cielo, el puño firme como si te estuvieras
agarrando de la mano de Dios. Ahora, ya sea verbal o mentalmente repite
"Con Dios como mi Testigo…
3. Coloca tu cuota de dinero del día de hoy
en tu contenedor y lee la afirmación que está en el contenedor tres veces.
Espera recibir algo en regreso.
4. Bendice a todos los que están a tu
alrededor, incluyendo a los otros participantes en este experimento. Imagina
como aquellos a quienes bendices prosperan y se rodean del bien. Entonces
bendícete a ti mismo e imagina lo mismo. Puedes continuar bendiciendo a la
persona o personas en tu lista de bendiciones. Lee todas las bendiciones que
llegan por correo electrónicos. Tus bendiciones están haciendo una diferencia.
El leer las respuestas te dará la oportunidad de verlo por ti mismo.
El Pensamiento del Día:
"La imaginación es un estímulo para la
felicidad. Si somos capaces de imaginar una situación, somos capaces de
lograrla."
-Anthony Norvell
La Afirmación del Día:
"¿No es maravilloso? ¡Algo maravilloso
me sucede ahora mismo!"
Día 58: ¿Recuerdas cuando…?
¿Has estado pensando mucho últimamente en lo
que quieres? ¿Te has preguntado cuándo se van a realizar finalmente tus sueños?
¿Estás dedicando tiempo cada día a pensar en lo linda que va a ser tu vida una
vez que tengas lo que deseas? Si es así, necesitas detenerte ahora mismo. Así
es. Detente. Ahora.
Mira, mientras te enfoques en lo que no
tienes todavía, pero que aún quieres, estás enviando una señal al Universo que
dice que lo que quieres no ha llegado. Y como esa es la señal que estás
enviando, eso es lo que el Universo continuará enviándote. No es que el
Universo esté reteniendo algo. Simplemente te refleja tu energía de regreso. Y aunque
conscientemente no es lo que quieres, la energía que mandas repetidamente está
diciendo "Mantenme en espera, por favor." Y el Universo lo hace.
Así es que no pienses en tener lo que deseas.
Es más, no pienses en lo que quieres para nada. Mejor comienza a pensar desde
lo que quieres. Si no lo entendiste la primera vez, lee las últimas dos
oraciones de nuevo. Nota la diferencia que hace una palabra. Es una diferencia
muy grande. Mientras pienses en lo que quieres, estás afuera viendo hacia
adentro, como un niño viendo desde la ventana de afuera de una dulcería. Cuando
comienzas a pensar desde lo que quieres, mentalmente entras en la tienda; saca
el dulce de la caja, sostenlo en tus manos y prueba su dulzura en tus labios.
Experimenta el dulce. Ve la diferencia. Tienes que hacer el cambio mental de ser
un observador a ser un experimentador. Y lo haces cuando cambias de “pensar acerca
de…” a “pensar desde...”.
Una de las formas en las que puedes hacer
esto es jugando el juego de “¿Recuerdas cuando…?”. Para jugarlo, todo lo que
tienes que hacer es pensar en que ya tienes lo que deseas y entonces imagina
que discutes tu sueño vuelto realidad desde la perspectiva de que ya sucedió.
Imagina como se siente ya tenerlo y entonces imagina una conversación con
alguien cercano donde dices algo como: "¿Recuerdas cuando no tenía….?
¿Recuerdas cuando estaba yo batallando para sobrevivir?"
Si te está costando trabajo pagar tus deudas
en este momento, podrías decir, "¿Recuerdas cuando ni siquiera podía pagar
mis facturas a tiempo? Y ahora tengo todo el dinero que necesito para todo lo
que necesito." Si deseas una nueva relación, puedes decir,
"¿Recuerdas cómo era mi vida antes de que la conociera? Y ahora no me imagino
no tenerla en mi vida." Si quieres una casa nueva, puedes decir, "¿Te
acuerdas de aquel pequeño departamento donde vivíamos? Y ahora que tengo esta hermosa
casa ¡la disfruto tanto!"
Las oraciones de "¿Recuerdas
cuando…?" funcionan porque automáticamente mueven tu perspectiva de pensar
en, a hablar desde, generando que mentalmente te coloques en una posición de
ver hacia atrás como si tu actual situación fuera el pasado. Al hacerlo, estás
colocando una distancia entre tú y lo que sea que pudiera ser, mientras que al
mismo tiempo te mueves mucho más cerca a lo que quieres ser.
No te quedes atrapado en pensamientos de
"Nunca va a suceder," o "Quizá no me lo merezco." Eso te
vence. Mejor sencillamente muévete a una posición de "desde" y mira
hacia atrás a tu situación actual como si fuera el pasado. Al hacerlo, permites
que tu imaginación piense que algo es verdad. Y antes de que lo sepas, así
será.
Lo que sea que quieres, ya sea una cosa, una
circunstancia, una relación – lo que sea – tienes la posibilidad de poseerlo en
tu mente, de usarlo en tus pensamientos como si lo estuvieras usando en tu
realidad física. Te puedes mover ahí, y desde esa posición de ventaja, puedes
mirar hacia atrás y mirar tu mundo. Puedes sentir la satisfacción que obtienes
de mirar desde ahí; revélate en alegría, siente la tranquilidad, la libertad de
estar donde perteneces.
Has esto consistentemente, sin permitir que
pase un día en que no te muevas hacia dónde quieres estar. Permítete pensar
desde tu sueño antes de irte a dormir cada noche y después cada mañana al
despertar piensa de nuevo. Hazlo, y te prometo esto:
No hay poder en la tierra que evite que se
convierta en la nueva realidad que estás creando.
La Acción del Día:
5. Lee tu Plan de Negocio para la Prosperidad
y las once cosas de tu lista de agradecimientos.
6. Toma un momento para pararte firmemente
con un brazo alzado hacia el cielo, el puño firme como si te estuvieras
agarrando de la mano de Dios. Ahora, ya sea verbal o mentalmente repite
"Con Dios como mi Testigo…
7. Coloca tu cuota de dinero del día de hoy
en tu contenedor y lee la afirmación que está en el contenedor tres veces.
Espera recibir algo en regreso.
8. Bendice a todos los que están a tu
alrededor, incluyendo a los otros participantes en este experimento. Imagina
como aquellos a quienes bendices prosperan y se rodean del bien. Entonces
bendícete a ti mismo e imagina lo mismo. Puedes continuar bendiciendo a la
persona o personas en tu lista de bendiciones. Lee todas las bendiciones que
llegan por correo electrónicos. Tus bendiciones están haciendo una diferencia.
El leer las respuestas te dará la oportunidad de verlo por ti mismo.
El Pensamiento del Día:
Porque si pudiera encontrar algo más sencillo
que decirles que lo que les he dicho, sería lo siguiente: entrar en el estado y
no simplemente pensar en el estado. Pensar desde es diferente que pensar en.
Debo de aprender a pensar desde. –Neville Goddard
La Afirmación del Día:
"Ahora vivo la vida que alguna vez
únicamente imaginé. ¡Mi sueño vuelto realidad! La puedo ver. La creo. ¡La vivo
ahora! "
Día 59:
La Gran Revelación
Al principio del Experimento de la
Prosperidad te pedí que comenzaras a colocar dinero en un contenedor cada día
con la idea de regalarlo cuando llegáramos al día 90. En ese momento, no te
dije quién sería el receptor de ese dinero.
Hoy ha llegado el momento de revelarte esta
información.
Pero antes quiero regresarte un poco en el
tiempo. ¿Recuerdas la historia acerca del hombre que paseaba a su perro a quien
se le acercó un mendigo? Si lo recuerdas, puede ser que también recuerdes que
más adelante en la misma historia, cuando el hombre se dio cuenta de que el
mendigo había usado el dinero imprudentemente, se enojó y decidió que nunca más
daría dinero. (Si no lo recuerdas, fue en el día 12)
En la historia, el hombre descubrió, como
todos debemos hacerlo, que cuando dejamos de dar a los demás, somos nosotros
los que sufrimos. Esto es porque el dar es tan necesario para que podamos vivir
una vida completa y balanceada así como el exhalar una respiración es
importante para poder inhalar. Hay un flujo y un reflujo inherente en todo en
la vida. Cuando nos negamos alguna parte de este proceso de dar y recibir, nos salimos
del flujo natural y nos alejamos de nuestro propio bienestar, así como el sostener
la respiración no solo nos evita exhalar, sino que nos evita respirar por completo.
En la historia contada anteriormente, después
de mucho sufrimiento, el hombre que se había negado a dar a los demás,
eventualmente se dio cuenta de su error y utilizó el poder de su imaginación
para reconstruir el escenario en su mente. Al hacerlo, mentalmente creó un resultado
benéfico para todos los involucrados.
Y eso es lo que te estoy invitando a hacer
hoy. Me gustaría que pusieras tu imaginación a trabajar. En tu mente, colócate
en el futuro, a un poco más de treinta días del día de hoy. Después de haber
estado fielmente colocando tu suma de dinero en tu contenedor durante 90 días,
ahora tienes el dinero disponible para regalarlo a alguien que se beneficiará
con tu regalo.
Así es que ahora, simplemente permite que tu
mente te dé la imagen de quien debe ser el receptor. No trates de forzar una
imagen de quien creas que es el receptor “perfecto”, simplemente relájate y
deja que llegue una imagen a tu mente. En este momento no necesitas saber un
nombre, un lugar, ni un tiempo. Simplemente necesitas imaginarte dando tu regalo
a la persona a quien le debe de llegar. E imagina, también, que todos los
involucrados en el proceso se benefician.
Una vez que tengas esta imagen en tu mente y
que te sientas bien con ella, expresa tu agradecimiento de que el receptor
perfecto para tu regalo viene ahora a ti. Y por el resto del Experimento de la
Prosperidad, cada día mientras colocas tu dinero en el contenedor, una vez más
revisita la imagen que creaste en tu mente del perfecto receptor que viene
hacia ti a aceptar su regalo. Entonces expresa tu agradecimiento, y suelta la
imagen a Dios.
No trates de controlarla. No busques para ver
si puedes “encontrar” al receptor viniendo hacia ti. No le adjuntes una lista
de cualidades que el receptor deba primero tener. No quieres cargar a la imagen
cosas que “deba tener”. Sólo relájate y recuerda que lo que te imaginaste ahora
es realidad y en el Orden Divino, Tiempo Divino y Propósito Divino te será
revelado.
Recuerda que al principio te dije que el
dinero era para alguien que imaginaras que lo necesitaba. Ahora ha llegado el
momento de la Gran Revelación, y solo TÚ puedes imaginar quien será.
Diviértete con este proceso. Como te sugerí
en el mensaje de ayer, no pienses en dar el dinero, piensa que ya lo diste.
Piensa en cómo te sientes por haber bendecido a alguien.
Piensa en el bien que se ha hecho. Piensa en
lo mejor para el receptor, también, y en tu mente, mira al receptor con poder
gracias a tu regalo para que él o ella devuelvan el favor haciendo algo por
otra persona.
Y mientras lo haces, comenzarás a sentir un
giro ocurriendo suavemente. Ese eres tú regresando a tu centro. Una vez más,
estás completamente entrando en el flujo y el reflujo de la vida.
Disfrútalo.
La Acción del Día:
9. Lee tu Plan de Negocio para la Prosperidad
y las once cosas de tu lista de agradecimientos.
10. Toma un momento para pararte firmemente
con un brazo alzado hacia el cielo, el puño firme como si te estuvieras
agarrando de la mano de Dios. Ahora, ya sea verbal o mentalmente repite
"Con Dios como mi Testigo…
11. Coloca tu cuota de dinero del día de hoy
en tu contenedor y lee la afirmación que está en el contenedor tres veces.
Espera recibir algo en regreso.
12. Bendice a todos los que están a tu
alrededor, incluyendo a los otros participantes en este experimento. Imagina
como aquellos a quienes bendices prosperan y se rodean del bien. Entonces
bendícete a ti mismo e imagina lo mismo. Puedes continuar bendiciendo a la
persona o personas en tu lista de bendiciones. Lee todas las bendiciones que
llegan por correo electrónicos. Tus bendiciones están haciendo una diferencia.
El leer las respuestas te dará la oportunidad de verlo por ti mismo.
El Pensamiento del Día:
"El dar nos libera del conocido terreno
de nuestras propias necesidades, abriendo nuestra mente a mundos inexplicados
ocupados por las necesidades de otros."
-Barbara Bush
La Afirmación del Día:
"Soy parte del flujo y reflujo natural
de la vida. "
Día 60:
Tu verdadero valor
Como mencionó Kate hace unos días, para el
resto de los 90 días del Experimento de Prosperidad vamos a estar estudiando
las Cinco Leyes Estratosféricas del Éxito, como están delineadas en “The
Go-Giver” (Dar para Recibir), una fábula moderna escrita por Bob Burg y
John David Mann.
Dar para Recibir es un cuento encantador
acerca de un ambicioso joven llamado Joe que anda en busca del éxito. Siendo un
verdadero buscador, Joe ocasionalmente siente que entre más trabaja, parece que
más se aleja de sus objetivos.
Desesperado, Joe busca el consejo del
“Presidente”, un legendario consultor llamado Pindar. Después de reunirse
brevemente con él, Pindar acepta trabajar con Joe durante cinco días, durante
los cuales le promete divulgarle información pertinente relacionada +
Con lo que él llama su Arma Secreta: Las
Cinco Leyes Estratosféricas del Éxito.
Pero primero existe una Condición que Joe
debe estar de acuerdo en cumplir. Pindar le pide que durante el transcurso de
los cinco días, mientras le explica las leyes, que Joe personalmente pruebe
cada una de estas leyes. Simplemente el pensar en o hablar de ellas no será
suficiente. Debe aplicar cada una de las leyes a su propia vida.
A medida que Kate leyó “Dar para Recibir”,
se dio cuenta de que la solicitud de esa condición fue lo que hizo posible que
Joe completamente comprendiera las cinco leyes y las aprendiera a usar a su
favor. Si no hubiera sido por la Condición de Pindar, las leyes nunca habrían
sido más que palabras en un papel, y cualquier éxito habría sido, cuando mucho,
marginal.
Con eso en mente, ahora tiene Kate una
condición para presentarte:
Durante el resto de este Experimento y en el
contexto de los mensajes diarios, se te van a presentar las Cinco Leyes
Estratosféricas del Éxito. Para obtener los mejores resultados de ellas, Kate
sugiere que a medida que te sean reveladas, apliques cada ley a tu propia vida.
A manera de ayudarte a decidir si vas a
cumplir esta Condición o no, Kate quisiera compartir contigo parte del diálogo
entre Pindar y Joe después de haberle inicialmente indicado la Condición:
"Joe comenzó a asentar, pero Pindar lo
detuvo y continuó.
'Y eso no es todo. Debes de aplicar cada Ley
de inmediato, el mismo día que la aprendas.'
Joe miró a Pindar para ver si estaba
bromeando. '¿En serio? ¿Antes de irme a dormir esa noche? ¿Y si no, me voy a
convertir en calabaza?'
La cara de Pindar se relajó y sonrió. Claro,
buen punto, no te vas a convertir en calabaza. Pero si no cumples con mi
Condición, nuestras reuniones terminarán.'
'Pero,' dijo Joe, 'no quiero sonar
impertinente, ¿cómo lo sabrías?'
'Otra excelente pregunta. ¿Cómo lo sabría?'
Pindar movió la cabeza, pensativo. 'No lo sabría. Pero tú sí. Es el sistema de
honor. Si no encuentras la forma de aplicar cada ley que yo te enseñe el mismo
día que la aprendas, confío en que al día siguiente llamarás
a Brenda para cancelar el resto de nuestras
reuniones.'
Miró a Joe.
'Tengo que saber que estás tomando esto en
serio. Pero he aquí algo aún más importante: tú eres el que tiene que saber que
está tomando esto en serio.'
Joe asintió suavemente. 'Creo que entiendo.
Quieres asegurarte de que no estoy desperdiciando tu tiempo. Es justo.'
Pindar le sonrió. 'Joe, no es por ofender,
pero no tienes ese poder.'
Joe lo miró confundido.
'No tienes el poder de desperdiciar mi
tiempo. Sólo yo lo puedo hacer. Y a decir verdad, es un vicio que dejé hace
mucho tiempo. La razón por la cual te pongo mi Condición es
que no quiero ver que tú pierdas tú
tiempo.'"
*********************************************************
He aquí la Primera Ley Estratosférica del
Éxito:
La Ley del Valor:
Tu verdadero valor está determinado por
cuánto más das en valor en comparación con lo que cobras.
En su pieza clásica, La Ciencia de Hacerse
Rico, el autor Wallace Wattles dijo esencialmente lo mismo cuando escribió:
"Da a cada hombre más valor en uso que el que tomes de él en valor en
efectivo; así estarás agregando al mundo con cada transacción de negocio."
Hace algunos días, Kate dedicó más o menos
una hora a trabajar afuera en el calor.
Cuando entró en su casa, inmediatamente
apreció lo bien distribuido que estaba su sistema de aire acondicionado. Ellos
instalaron un nuevo sistema hace unos dos veranos para reducir el gasto de la
electricidad, y cuando hicieron la compra, sintieron que el precio era algo
alto. Sin embargo, después de estos dos años esa maquinaria no solo les ahorró
dinero, sino que les dio mucho más valor en confort que el que originalmente pagaron.
Este día en particular, mientras ella entraba a su casa, podría haber pagado hasta
el doble para asegurar que el fresco la reconfortara.
Esta Primera Ley Estratosférica del Éxito no
quiere decir que tenemos que dar más que lo que recibimos. Como te lo diría
cualquier propietario de negocio inteligente, esa sería una manera rápida de
tronar. Sencillamente significa que el valor intrínseco que damos a cambio de
dinero – ya sea por un servicio, un producto, o una idea – debe de ser mayor que
el valor que recibes. El sistema de Kate es un ejemplo.
Creo que la mayoría de nosotros estamos
"diseñados" para dar más en valor de lo que recibimos a cambio.
Queremos dar más que lo que pedimos porque se siente bien hacerlo. Nos hace
sentir conectados. Cuando tomamos más que lo que damos a cambio, reducimos el
valor en general de la transacción. No importa cuál es el valor del producto,
servicio o idea que estamos intercambiando, si pedimos más a cambio de lo que
vale, no solo estamos haciéndole trampa al otro, nos estamos haciendo trampa a nosotros
mismos al contener el flujo de la energía. Estamos demandando que el flujo vaya
en un solo sentido. Imagínate que rápido se secarían los océanos del mundo si cuando
la marea subiera, la tierra se chupara toda el agua y se negara a regresar ni
una gota al mar. Hay un flujo y un reflujo de energía en todo en la vida,
incluyendo lo que damos y recibimos.
Y así como las mareas, la energía fluye en
ambos sentidos. Todos conocemos a alguien que quiere algo a cambio de nada. El
problema es que, sin importar lo que les den, generalmente no es suficiente. El
tomar sin dar a cambio es una acción basada en el miedo. Surge de un temor de
ser excluido de la plenitud de la vida. Surge cuando salimos del flujo de la
vida y equivocadamente asumimos que debemos de tomar y demandar para
sobrevivir.
Cuando vamos por la vida demandando que todo
nos sea dado solo nos privamos a nosotros mismos porque no nos podemos sentir
totalmente conectados con la Fuente de Energía a menos de que estemos
participando en el dar y tomar de su flujo.
El adherirse a la Primera Ley Estratosférica
del Éxito es absolutamente mandatorio para una perspectiva próspera porque a
menos que estemos dispuestos a participar completamente en el dar y tomar de la
vida, no podemos agregar al valor que damos al mundo o el valor que nos damos a
nosotros mismos.
Wallace Wattles sabía lo que decía cuando
aconsejó, "Desea para todos lo que deseas para ti, y asegúrate de no tomar
nada de nadie sin dar el mismo equivalente a la vida; y entre más des, mejor
será para ti."
La Acción del Día:
13. Lee tu Plan de Negocio para la
Prosperidad y las once cosas de tu lista de agradecimientos.
14. Toma un momento para pararte firmemente
con un brazo alzado hacia el cielo, el puño firme como si te estuvieras
agarrando de la mano de Dios. Ahora, ya sea verbal o mentalmente repite
"Con Dios como mi Testigo…
15. Coloca tu cuota de dinero del día de hoy
en tu contenedor y lee la afirmación que está en el contenedor tres veces.
Espera recibir algo en regreso.
16. Bendice a todos los que están a tu
alrededor, incluyendo a los otros participantes en este experimento. Imagina
como aquellos a quienes bendices prosperan y se rodean del bien. Entonces
bendícete a ti mismo e imagina lo mismo. Puedes continuar bendiciendo a la
persona o personas en tu lista de bendiciones. Lee todas las bendiciones que
llegan por correo electrónicos. Tus bendiciones están haciendo una diferencia.
El leer las respuestas te dará la oportunidad de verlo por ti mismo.
El Pensamiento del Día:
"La mayoría de la gente se ríe cuando
escuchan que el secreto para el éxito es dar... Sin embargo, la mayoría de la
gente no es tan exitosa como quisiera serlo."
-Pindar, de Dar para Recibir por Bob Burg y
John David Mann
La Afirmación del Día:
"Amo dar porque puedo."
Día 61:
¿Cómo te hace sentir?
A principios de los 90s había una pequeña
compañía de velas en la comunidad de Kate que creció a ser una gran empresa en
poco tiempo. Sorprendidos por su éxito tan rápido, la compañía decidió un día
mover su operación a una ciudad más grande.
El problema fue que como ya vendían tantas
velas con el nombre de esa comunidad, la gente continuamente viajaba al pequeño
pueblo para comprar más velas. Pero ahora ya no había velas. Los clientes se
iban con las manos vacías. Kate y una amiga de ella comenzaron a platicar
acerca de cuánto se necesitaba una compañía de velas en el pueblo y ya que hay
un dicho que dice que para tener éxito en la vida hay que encontrar una
necesidad y satisfacerla, ellas decidieron que esa sería la necesidad que ellas
satisfarían. Comenzaron una empresa de velas de soya.
Un año más tarde, Kate estaba sola una mañana
en la tienda, cuando una mujer entró queriendo saber dónde estaba la compañía
de velas anterior. Kate le explicó que se habían cambiado como a 70 millas de
distancia, y ella pidió más información, así es que Kate le escribió la
dirección en un pedazo de papel.
Pero la mujer insistió. Ella parecía
interesada en decirle a Kate porqué había manejado hasta este pueblo, y porqué
únicamente esas velas la satisfarían. Kate no se preocupó, ella había llegado
temprano para hacer algo de trabajo pendiente, y la vio más como una
interrupción que como un cliente. Pero entre más hablaba la mujer, más se enojaba,
hasta el punto de insinuar que Kate era la responsable de todo.
De repente, el propio enojo de Kate comenzó a
surgir. Hasta ese momento, nunca había visto al otro proveedor de velas como un
competidor, pero al estar parada en su tienda llena de hermosas velas,
escuchando a la mujer hablar de las “otras” velas, sintiendo que las velas de
ella eran inferiores, Kate quería demostrarle que no era así. Cada vez que la
mujer alababa las otras velas, Kate aprovechaba para mostrar los beneficios de sus
velas.
Pareciera que hablaba con la pared.
Finalmente, la mujer miró el pedazo de papel que Kate le dio y dijo, “Bueno,
creo que el viaje fue en vano” y salió repentinamente de la tienda.
Kate se quedó muy enojada, frustrada y
desilusionada de que había desperdiciado su tiempo, y de repente pensó: Nunca
convencería a nadie de lo bueno que son nuestras velas estando enojada porque
le gustan las velas de alguien más.
De repente, Kate agarró una de sus velas más
populares y corrió atrás de la mujer. Ella ya estaba en su auto y salía del
estacionamiento cuando Kate la alcanzó. Le hizo señales para que se detuviera,
y cuando lo hizo, le regaló la vela.
"Aquí tiene," le dijo Kate,
"Se la debí de haber dado antes. Ya que hizo un viaje tan largo, no
quisiera que se fuera con las manos vacías. Llévela a casa y pruébela. Se la regalo.
Quien sabe, quizá le gusten más las de nosotros."
La mujer agradeció a Kate y se fue. Y Kate
entró en la tienda sintiéndose muy bien.
Quizá crean que les voy a decir que la mujer se
convirtió en un leal cliente de Kate.
Pero no. Al parecer nunca regresó.
Nunca importó. Porque, en el momento en el
que Kate hizo a un lado su enojo para darse cuenta de que esta mujer entró en
su tienda queriendo velas y Kate la había dejado salir con las manos vacías,
ella se dio permiso de dejar de pensar en lo que necesitaba para comenzar a
pensar en lo que la cliente deseaba. Y eso hizo toda la diferencia.
La Primer Ley Estratosférica del Éxito dice
que nuestro verdadero valor se determina por cuánto más damos en valor que lo
que tomamos en pago. Hoy en día, sin embargo, la ley tiene poco que ver con lo
que damos o recibimos. Tiene mucho más que ver con el sentimiento, porque la
forma en la que nos sentimos determina si vivimos nuestras vidas por completo o
no.
Cuando la mujer entró en la tienda y comenzó
a decirle a Kate de las otras velas y cuánto las quería, Kate sintió la
necesidad de venderle una de las de ella. No era porque deseaba que la mujer se
llevara un producto de calidad. Era porque quería demostrarle que estaba
equivocada. Estaban atacando su autoestima y necesitaba que la venta la hiciera
sentirse bien.
Cuando Kate corrió atrás de ella y le regaló
la vela, su enfoque cambió de lo que ella necesitaba para sentirse bien a lo
que la mujer necesitaba para que sintiera que su viaje no había sido en vano.
No sabe si el haberle regalado la vela hizo
la diferencia. Pero sabe que fue una mejor embajadora de su comunidad al
regalarle una vela a esa mujer que si la hubiera dejado irse enojada y sin nada
en las manos. Y lo que es seguro es que Kate se sintió mucho mejor. Y si lo
pensamos bien, de eso se trata; de sentirnos mejor.
Porque cuando actuamos de manera que nos
sentimos bien, nuestras vibraciones se incrementan. Cuando nos limitamos,
determinados a no dar nada a menos que el retorno instantáneo esté garantizado,
nuestras vibraciones son bajas. El que nosotros retengamos, no solo evita que
los demás gocen de lo que podríamos darles. Nos priva a nosotros de los
sentimientos buenos que podríamos experimentar al dar.
No estoy sugiriendo que si eres el dueño de
un negocio, regales tus productos a todo el que entra en tu empresa. Estoy
sugiriendo que en cada transacción que participes, busques la manera de hacer
sentir bien a tu cliente y a ti.
Porque la vida es demasiado corta para
evitarnos los unos a los otros oportunidades para sentirnos bien.
¿No crees?
La Acción del Día:
17. Lee tu Plan de Negocio para la
Prosperidad y las once cosas de tu lista de agradecimientos.
18. Toma un momento para pararte firmemente
con un brazo alzado hacia el cielo, el puño firme como si te estuvieras
agarrando de la mano de Dios. Ahora, ya sea verbal o mentalmente repite
"Con Dios como mi Testigo…
19. Coloca tu cuota de dinero del día de hoy
en tu contenedor y lee la afirmación que está en el contenedor tres veces. Espera
recibir algo en regreso.
20. Bendice a todos los que están a tu
alrededor, incluyendo a los otros participantes en este experimento. Imagina
como aquellos a quienes bendices prosperan y se rodean del bien. Entonces
bendícete a ti mismo e imagina lo mismo. Puedes continuar bendiciendo a la
persona o personas en tu lista de bendiciones. Lee todas las bendiciones que
llegan por correo electrónicos. Tus bendiciones están haciendo una diferencia.
El leer las respuestas te dará la oportunidad de verlo por ti mismo.
El Pensamiento del Día:
"Das, das, das. ¿Por qué? Porque te encanta. No es una estrategia. Es
una forma de vida.
Y cuando das, entonces cosas muy redituables
comienzan a suceder."
-de “Dar para Recibir” por Bob Burg y John
David Mann
La Afirmación del Día:
"Doy a los demás porque me amo"
Día 62: La Pregunta
¿Te gustaría saber una forma sencilla de
siempre dar el mayor valor en todo lo que das? Es muy sencillo. Todo lo que
tienes que hacer con cada producto que vendas, o servicio que ofrezcas, o idea
que intercambies, o trabajo que hagas, es ponerte en los zapatos del receptor y
hacerte esta única pregunta:
Si yo estuviera recibiendo esto, ¿me
agradaría?
Así de fácil. Todo lo que tienes que hacer
para siempre asegurar que das más en valor que lo que recibes en pago es vivir
honestamente con la Regla Dorada. Trata a los demás como quieres ser tratado.
Sirve a los demás como quieres que te sirvan a ti.
Respeta a los demás como quieres ser
respetado. Bendice a los demás de la manera en la que quieres ser bendecido tú.
Ama a los demás de la manera que quieres ser amado.
Cuando te pidan, da más que lo que te pidan.
Si esperan que camines un kilómetro, camina más. Has lo mejor que puedas, sé el
mejor que puedas y da lo mejor que puedas con lo que puedas ahora mismo. Y
mientras lo haces, se te dará más para que puedas hacer más, ser más, dar más
por los demás. Así funciona el Universo.
Y estarás viviendo por medio de la Primera
Ley Estratosférica del Éxito.
¿Ves? Te dije que era fácil.
La Acción del Día:
21. Lee tu Plan de Negocio para la
Prosperidad y las once cosas de tu lista de agradecimientos.
22. Toma un momento para pararte firmemente
con un brazo alzado hacia el cielo, el puño firme como si te estuvieras
agarrando de la mano de Dios. Ahora, ya sea verbal o mentalmente repite
"Con Dios como mi Testigo…
23. Coloca tu cuota de dinero del día de hoy
en tu contenedor y lee la afirmación que está en el contenedor tres veces.
Espera recibir algo en regreso.
24. Bendice a todos los que están a tu alrededor,
incluyendo a los otros participantes en este experimento. Imagina como aquellos
a quienes bendices prosperan y se rodean del bien. Entonces bendícete a ti
mismo e imagina lo mismo. Puedes continuar bendiciendo a la persona o personas
en tu lista de bendiciones. Lee todas las bendiciones que llegan por correo
electrónicos. Tus bendiciones están haciendo una diferencia. El leer las
respuestas te dará la oportunidad de verlo
por ti mismo.
El Pensamiento del Día:
"La primer pregunta debería ser, ¿Sirve?
¿Agrega valor a los demás? Si la respuesta a esa pregunta es sí, entonces
puedes preguntar, '¿Genera dinero?"
-Ernesto, de Dar para Recibir, por Bob Burg y
John David Mann
La Afirmación del Día:
"Siempre doy a los demás de la manera en
la que me gustaría que me dieran a mí."
Día 63:
El Regalo de Dar
De acuerdo a estándares mundiales, cuando
regalas algo, tienes menos de eso. Continúa dando, de acuerdo a esos
estándares, y corres el riesgo de quedarte sin nada. Pero no es así como
funcionan las cosas.
El amor, por ejemplo. Si le fueras a decir a
alguien en este momento que lo amas y lo apoyas, ¿reduciría la cantidad de amor
que tienes para dar? Claro que no. Tu habilidad para amar no se reduciría para
nada al dar. Cuando bendices a otra persona, ¿significa esto que tienes una
bendición menos para compartir? No. El darle una bendición a otra persona no
hace nada para reducir el número de bendiciones que tienes para dar.
El amor y las bendiciones son energía. El
dinero también es energía. La principal diferencia entre los tres es que
pensamos en las primeras dos como bienes intangibles mientras que pensamos en
la tercera como un bien tangible. Pero en realidad la tercera no es más
tangible que las otras dos. Es solo una idea, a la cual le adjuntamos un símbolo
físico ocasionalmente, pero ya sea que le adjuntemos o no un símbolo, el hecho es
que el dinero es sobre todo una idea. Y las ideas son pensamientos y los
pensamientos son energía y la energía puede cambiar de forma, pero no se acaba.
Nunca. Hace poco, Kate llamó a su banco para solicitar que le transfirieran
dinero de su cuenta a la de una amiga. Durante este intercambio, ella no tocó
el dinero físicamente.
Tampoco lo hizo el cajero que hizo la
transferencia. Sencillamente puso un pensamiento en palabras y le habló las
palabras a la persona del banco. Para efectuar la solicitud, el cajero
electrónicamente movió números de una cuenta a otra. Los números bajaron temporalmente
de la cuenta de Kate, pero eso se corrigió con otro intercambio de energía al
día siguiente en forma de un depósito. Nada se intercambió, excepto energía, y
como todo en la naturaleza, algo salió y algo entró: todo es parte del flujo y
del reflujo natural.
Los que crean que tendrán menos después de
dar, por supuesto, seguramente experimentarán un mayor período de carencia,
pero solo porque así lo creen y lo esperan. Cuando alguien experimenta carencia
por algún período extendido de tiempo, es porque ha aceptado el estándar
mundial como algo válido. Se ha vuelto su realidad.
Pero hay un estándar superior, donde el dar
es intercambiar energía y donde entre más das, más tendrás para dar, y entre
menos das, menos tendrás para dar.
La experiencia personal de Kate ha sido que
entre más da, se siente más emocionada, energética y feliz. Le encanta como se
siente cuando da a los demás, ya sea tiempo, dinero o bendiciones. Ha llegado a
aceptar el dar como un paso vital en su camino personal para convertirse en
quien ella quiere ser.
Ella también cree personalmente que a menos
de que esté primero dispuesta a dar, estará complicándolo todo para que pueda
recibir. Y no es algo que ella quiere. ¿Y tú?
Para ilustrar el punto, tiene un par de
experimentos para que hagas. Primero, inhala profundamente. Jala la mayor
cantidad de aire posible a tus pulmones y sostenlo ahí por cinco o diez
segundos. No dejes que salga nada del aire. Mantén tus pulmones llenos.
Ahora trata de inhalar más aire sin dejar que
nada escape de tus pulmones primero. ¿No puedes, verdad? Si no haces espacio
para más, no puedes recibir más.
En el segundo experimento, pon una moneda de
diez pesos en tu mano y cierra el puño alrededor de la moneda. Coloca la otra
mano encima y pídele a alguien que te de otra moneda de diez. Trata de tomar la
moneda sin soltar las manos de alrededor de la moneda inicial. Quizá puedas
sostener una moneda, pero no podrás hacer esto muchas veces. Si alguien te
continuara dando monedas o billetes, llegaría el momento en que no podrías
tomarlos a menos de que soltaras tus manos.
No puedes recibir, hasta que hayas dado. El
dar es parte del proceso de recibir.
Estamos hechos para dar y recibir. El pensar
que podemos hacer uno sin lo otro es como sentarnos en una de las orillas de un
sube-y-baja esperando divertirnos, pero negándonos que alguien se siente del
otro lado.
En momentos difíciles, es más fácil
enfocarnos en nuestros problemas y solo preocuparnos por nosotros. El dar nos
ayuda a escapar de esa trampa. Nos jala hacia arriba, como cuando una persona
sentada del otro lado del sube-y-baja nos eleva del piso. A través de este
sencillo intercambio de energía al dar a los demás, nos encontramos llenos de
una energía alegre y llena de recompensas.
El dar nos recuerda que somos seres
ilimitados viviendo en un universo infinito.
El dar nos ayuda a ir más allá de nuestros
límites.
El dar nos hace sentir abundantes.
El dar nos ayuda a crecer.
El dar es un regalo que nos damos a nosotros
mismos.
La Acción del Día:
25. Lee tu Plan de Negocio para la
Prosperidad y las once cosas de tu lista de agradecimientos.
26. Toma un momento para pararte firmemente
con un brazo alzado hacia el cielo, el puño firme como si te estuvieras
agarrando de la mano de Dios. Ahora, ya sea verbal o mentalmente repite
"Con Dios como mi Testigo…
27. Coloca tu cuota de dinero del día de hoy
en tu contenedor y lee la afirmación que está en el contenedor tres veces.
Espera recibir algo en regreso.
28. Bendice a todos los que están a tu
alrededor, incluyendo a los otros participantes en este experimento. Imagina
como aquellos a quienes bendices prosperan y se rodean del bien. Entonces
bendícete a ti mismo e imagina lo mismo. Puedes continuar bendiciendo a la
persona o personas en tu lista de bendiciones. Lee todas las bendiciones que
llegan por correo electrónicos. Tus bendiciones están haciendo una diferencia.
El leer las respuestas te dará la oportunidad de verlo por ti mismo.
El Pensamiento del Día:
"Puedes obtener grandes beneficios al
dar. Entre estos beneficios están los nuevos amigos, un sentimiento de
seguridad, alegría y un sentido de orgullo. Estás en tu mejor lugar cuando
haces la diferencia y contribuyes."
-de La Fuerza de Dar por Azim Jamal y Harvey
McKinnon
La Afirmación del Día:
"El dar es un regalo que me doy a mí
mismo."
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